Receta de Locro tucumano
El locro es un guiso típico de Argentina especial para afrontar el invierno, y es infaltable en las celebraciones de las fechas patrias del 25 de mayo y el 9 de julio. Como todos los platos populares, existen infinidad de versiones, aunque todos comparten sus ingredientes básicos: maíz blanco, porotos, zapallo y carne.
En RecetasGratis te enseñamos cómo hacer locro tucumano. ¡Vamos a cocinar!
Ingredientes para hacer Locro tucumano:
Cómo hacer Locro tucumano:
Pon en remojo los porotos por 12 horas (puedes hacerlo la noche anterior). Luego, enjuágalos y pre-cocina en abundante agua hirviendo unos 20 minutos.
Realiza el mismo procedimiento con el maíz blanco, es decir, deja en remojo 12 horas, enjuaga y hierve 20 minutos.
Pela el zapallo y córtalo en cubos. Realiza una pre-cocción hirviéndolos 15 minutos y reserva junto con el caldo.
Truco: elige el tipo de zapallo que esté en su temporada para que sea más sabroso. Puede ser calabaza, zapallo plomo o kabutia.
Desgrasa el chorizo de cerdo hirviéndolo 15 minutos. Corta en rueditas.
Pela el chorizo colorado y corta también en ruedas.
Retira el exceso de grasa que pueda tener la carne de vaca y la de cerdo y coloca en una fuente alta. Añade los porotos, el maíz blanco, el chorizo de cerdo, el chorizo colorado y el zapallo junto con el caldo de cocción. Termina de cubrir los ingredientes con agua y lleva a fuego fuerte hasta que hierva.
Baja a temperatura mínima y continúa la cocción por alrededor de 1.30 o 2 hs, hasta que el zapallo se deshaga y la preparación tome una consistencia algo espesa. Revuelve cada tanto para evitar que se pegue.
El locro casero tucumano está listo. ¡A comer! Comparte en comentarios tus fotografías y opinión sobre esta receta.
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Con qué acompañar el locro tucumano
El locro argentino tiene una compañera fiel que es la salsa para locro llamada “fritito”, “sofrito” o “ají frito”. Además, el otro complemento infaltable es la copa de vino argentino. Por tratarse de un plato calórico y potente, con bastante contenido de grasa, marida muy bien con vinos tintos igualmente intensos como el Malbec o el Cabernet Sauvignon. Asimismo, la astringencia de estas variedades ayudará a “limpiar” la boca.
Sin embargo, quienes prefieren los blancos, también acertarán si eligen un Torrontés, una variedad fresca, ligera y con la acidez justa para contrarrestar el picante del sofrito.
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